La trinidad doctrina pagana

La trinidad fue una "doctrina" que apareció en el tercer siglo, se desarrolló notablemente en la segunda mitad del cuarto siglo, y el credo que la caracteriza (e.d. Credo de Atanasio) sólo tomó su forma definitiva hasta finales del siglo quinto. Los teólogos y escritores trinitarios, generalmente coinciden en: 1. Aceptar que la Santa Escritura no posee una declaración formal relacionada con la Trinidad. 2. Reconocer que la Escritura no contiene la doctrina formada de la Trinidad. 3. Afirmar que el Nuevo Testamento no es suficiente pues se quedó en una etapa de infancia embrionaria en sus declaraciones doctrinales, específicamente con relación a la naturaleza de Dios. (Una declaración típica de las sectas). 4. Reconocer que el dogma de la trinidad tuvo un desarrollo extrabíblico, en un tiempo post-bíblico para ser formulado como hoy en día lo conocemos. 5. promover la falsa doctrina de la “Sagrada Tradición”, reclamando para las formulaciones post-bíblicas (especialmente para el Credo de Atanasio) una autoridad igual o superior al Nuevo Testamento, pese a que el concepto o la idea del dogma trinitario no se encuentra en la Biblia. Todos las organizaciones trinitarias (ya sea de la corriente católica romana, ortodoxa griega o prostestante), le dan más honor al Credo de Atanasio que a la Biblia. Los trinitarios han sido condicionados a pensar que Dios es una trinidad, por medio de un entrenamiento extra-Escritural, pero muchos de ellos ni siquiera se han detenido a reflexionar que la Escritura nada habla sobre el “Dios que es tres”. La manera en que la “teología” trinitaria confunde a la gente para que adultere la Palabra de Dios, puede exponerse así: 1. Asuma que el Credo de Atanasio está a un nivel superior a la Biblia y que sirve para reinterpretar la Biblia. 2. Reinterprete la Biblia en consonancia con el Credo de Atanasio, eliminando siempre las concepciones mentales que puedan contradecir dicho Credo. 3. Conforme con el Credo de Atanasio, todas las veces que lea en la Biblia “Padre”, “Hijo” y “Espíritu Santo”, piense que se trata de tres personas distintas que hacen parte de un dios trino. 4. No se preocupe por los errores, absurdos y contradicciones del dogma trinitario. Recuerde que este está por encima de los parámetros que la inteligencia humana puede concebir. 5. Repita el ciclo anterior de manera indefinida y no se olvide de enseñar a otros que el Dios de la Biblia es una trinidad, para que ellos también transiten por la senda que usted ha decidido tomar. Las sectas que actualmente adoran al dios Trino, pueden clasificarse en tres categorías: 1. LA IGLESIA CATOLICA ROMANA: Es la mayor representante del pensamiento trinitario. Tomó forma en el Concilio de Nicea del año 325, que fue convocado por el emperador romano Constantino y durante muchos siglos fue la única exponente del dogma trinitario. El desarrollo del dogma de la trinidad fue un proceso lento que consumió muchos siglos, y no empezó con la Iglesia Católica, pero sí fue aprobado y abrigado oficial e institucionalmente por dicha organización religiosa. 2. LA IGLESIA ORTODOXA GRIEGA: Se originó en el suceso conocido como Cisma de Oriente, del año 1054. La Iglesia Ortodoxa Griega afirmó que el "Espiritu trinitario" procedia unicamente del "Padre trinitario", mientras que la Iglesia Católica Romana, continuó con la creencia de que la tercera persona de su dios trino, procedía del "Padre trinitario" y del "Hijo trinitario" de manera simultanea. 3. LAS IGLESIAS PROTESTANTES TRINITARIAS: Se originaron en la llamada reforma protestante de 1517, cuando ciertos curas, monjes y feligreses católico romanos, optaron por separarse de la Iglesia Católica Romana, porque afirmaron que esta se había corrompido. Aunque renunciaron a muchas de las doctrinas erradas del catolicismo, continuaron con la adoración al dios Trino. El trinitarismo asegura creer en la Deidad de Jesucristo, pero va en contravía de la Escritura, pues enseña que Jesús no es el Dios Único, sino que hay otras dos “divinas personas” que comparten su Deidad y que son tan Dios como lo es Él. De esa forma menosprecian y rebajan la plena Deidad de Jesucristo, y desvían su creencia hacia el falso dios Trino. Publicado por Julio César Clavijo Sierra en 16:41 Etiquetas: religiones, sectas, trinidad La Virgen María no fue Católica Por Cohen Gary Reckart La virgen María no fue Católica. Muchos no saben esto. Pero es verdad. Aquí están algunas otras realidades las cuales muchos no conocen: María no era una mujer blanca europea. Estos cuadros de María son de una mujer blanca europea y en ninguna manera representan a la verdadera María de la Biblia. La verdadera María de la Biblia no era una blanca europea, sino que tenía su piel más oscura. Ella era de la tribu de Judá de la simiente de David; y Rut la bisabuela de David, era una mujer Moabita Negra. David no era un hombre blanco europeo. Cualquier representación de María como una mujer blanca europea es falsa. Pero muchos no saben esto. Los cuadros lucen bellos y aducen a alguien de simpatía y amor de pureza. Estos iconos son diseñados para apelar al corazón de una persona y no a su pensamiento. Actualmente, estos cuadros son adorados por muchos que creen que estas imágenes de María contienen su misma presencia. Los cuadros de María son ídolos cuando las personas les oran o les dan adoración en oraciones. Aquí están algunas otras realidades que las personas no conocen sobre María. María nunca oró con un rosario. El cuadro de María arriba a la derecha, muestra a María con un rosario y con sus manos plegadas en una posición de oración, pareciendo como si ella estuviera usándolos para hacer sus oraciones ¿Es esta una verdadera imagen de la María real, o es éste un cuadro diseñado para llevar a los Católicos a creer que si María ora el rosario, entonces esto debe ser lo que ellos deberían hacer? El rosario fue inventado por Pedro el Ermitaño en 1090 d.C. y plenamente comprometido en la Iglesia Católica por “Santo” Domingo en el año 1214 d.C. , siendo aprobado por el Papa Inocencio III. ¿Cómo podría María usar algo que no fue inventado hasta más de 1000 años después de su muerte? “Santo” Domingo afirmó que María le dio el rosario. La realidad es que “Santo” Domingo mintió. Él utilizó a María como la fuente de éste, para que fuese rápidamente aceptado por todos los Católicos ¿De dónde María, una mujer Judía, obtendría alguna idea de este diseño pagano? El rosario no fue conocido por ninguno de los Apóstoles. Ellos nunca oraron usándolo. Seguramente María se los pudo haber presentado si éste era algo que todos los cristianos debían usar. Otro punto de interés aquí, es que nosotros seguimos la Doctrina de los Apóstoles. En ningún lugar los Apóstoles nos dicen que María tuvo alguna revelación o poder especial dentro o sobre la Iglesia del Nuevo Testamento. Por tanto, la introducción del rosario por “Santo” Domingo es sospechosa en muchas maneras. Ni una vez en la vida de María, ella siquiera oró usando el rosario. María nunca asistió a una Iglesia Católica. Muchos no saben que no hubo Iglesia Católica hasta el 325 d.C. La Iglesia Católica fue formada por más o menos 318 Obispos en el Concilio de Nicea. Antes de esta fecha no había Iglesia Católica unificada. Fue en este año que Constantino estableció la Iglesia Católica convocando a un cierto número de obispos, e inventaron el Credo de Nicea. Así, María nunca asistió a una Iglesia Católica. Alguien preguntó: "¿Acaso no era María Cristiana? ¿Esto no la hace una Católica?" No, esto no hace a María una Católica. En realidad, ninguno de los Apóstoles fue Católico y nunca fueron parte de la Iglesia Católica. ¿De todas formas qué es un cristiano? Un cristiano es una persona que se ha convertido a la religión de Jesús el Mesías. El nombre Cristiano se compone de dos partes "Cristo" que quiere decir Mesías, hijo de David, Rey y Señor de Israel; y "anos" el cual es un sufijo añadido a los nombres como Corintianos, Efesianos, etc. y es equivalente al "itas" bíblico, que simplemente quiere decir "pueblo". Así, el nombre Israelitas quiere decir: pueblo de Israel. Correspondiendo entonces, tenemos que Corintianos quiere decir pueblo de Corinto. Con este entendimiento, podemos ver que cristianos o cristitas son lo mismo, e interpretado conservando la sintaxis y el significado, sería Pueblo del Mesías, Pueblo del Rey de Israel, o Pueblo del Señor. Colectivamente son identificados como Creyentes Cristianos o Mesiánicos. Ahora, ya que la Iglesia Católica no existió hasta el 325 d.C, ningún Cristiano, ningún creyente Mesiánico, ningún pueblo del Mesías, fue Católico. María nunca fue a confesión. El confesionario no fue instalado en la Iglesia Católica hasta el 1215 d.C., e instituido por el Papa Inocencio III. A partir de entonces, los miembros de la Iglesia Católica no se arrepintieron directamente ante de Dios, pues a ellos se les dijo que podían confesarle sus pecados a un Sacerdote quien tenía el poder para perdonarles sus pecados. El confesionario ha sido utilizado para obtener información sexual con la cual seducir mujeres y a muchachos. Ha sido utilizado por los sacerdotes, para extraer de quienes se confiesan, información sobre otras personas. El confesionario es utilizado para hacer que los católicos sientan que necesitan al sacerdote y a la Iglesia Católica más de lo que necesitan a Dios. María nunca fue a un confesionario. María nunca se roció con agua bendita. El rociar con “agua bendita” fue inventado en el año 1009 d.C. Antes de ese tiempo nunca fue utilizado por ninguna Iglesia Cristiana en el mundo. El propósito de rociar con “agua bendita”, fue el de crear otro ritual más al que los Católicos aceptaran como una obra esencial para ser salvo. Un niño Católico que es criado con este ritual, sentirá que deshonra a Dios si no se rocía al estar en una Iglesia. Este ritual del “agua bendita”, ha crecido en muchas otras ceremonias de rociar. Estuve en Valdez, Alaska, y el sacerdote Católico local, hacía que todos los católicos trajeran a sus mascotas para recibir un rociar especial de “agua bendita”. María nunca utilizó agua bendita, ni participó de cualquier ritual de rociamiento de agua en ningún momento. María no fue Católica. María nunca creyó o supo sobre el Limbo-infierno o del Purgatorio-infierno para niños mayores y adultos. La existencia del purgatorio fue proclamada como realidad en el año 1438 d.C. El limbo fue proclamado como realidad en el siglo quinto. Ambos, el Purgatorio y el Limbo, fueron inventados para hacer dinero para la Iglesia Católica. Ellos enseñaron que las solas oraciones no libran de las llamas del infierno, por lo cual se necesita del dinero. El dinero podía consistir en una ofrenda para la caja de los pobres, podía ser para un fondo misionero, podía ser para adquirir una vela fabricada por la Iglesia o por un auxiliar, o solo simplemente por colocar su dinero en el plato de la ofrenda. Sin embargo, no hay nada en la Palabra de Dios sobre el Purgatorio o el Limbo. Éstas son invenciones hechas por hombres. Una cosa es segura, María nunca supo sobre o creyó en el Purgatorio o el Limbo. María no fue Católica. María no creyó en la inmaculada concepción. Los judíos no tenían una enseñanza o doctrina de que el pecado era heredado por un bebé de la sangre de sus padres. La doctrina del pecado heredado por la línea de sangre, no se encuentra en ningún lugar en la Biblia. Los judíos no tenían una doctrina o enseñanza de que los padres pasaban a sus hijos todo el pecado heredado en la cadena genealógica familiar hacia atrás, llegando hasta Adán y Eva. Ya que los judíos no creían en el pecado heredado, no había necesidad de que hubiera una doctrina que María tuvo que nacer sin pecado para dar a luz a Jesús, a fin de que él no tuviera sangre contaminada. La doctrina de la inmaculada concepción de María, fue hecha una enseñanza obligatoria de la Iglesia Católica hasta 1845 d.C., aunque hubo algún tiempo anterior a esta fecha, en la que ya se creía que el pecado se heredaba mediante la línea de sangre, y que esto implicaba que si María tuvo un hijo cuya línea de sangre venía desde Adán, entonces su sangre estaba manchada. Entonces de acuerdo con esa teoría, para que Jesús pudiera nacer perfecto y su sangre fuera sin pecado, era necesario hacer algo por María y su sangre manchada por el pecado. Así que inventaron la falsedad de la inmaculada concepción de María e hicieron que los católicos la aceptaran. De esa forma, los católicos podían continuar haciendo dinero de las muertes de los pequeños bebés, a cuyos padres se les decía que el niño estaba en las llamas del Limbo y no podía escapar a menos que se pagara cierto dinero a la Iglesia y se hicieran ciertas oraciones. María nunca fue a una Iglesia Católica. María nunca asistió a lo que se convirtió en la Iglesia Católica en el 325 d.C. y a lo que la Iglesia Católica es hoy. Ni una vez en su vida ella asistió a una Iglesia donde había imágenes y estatuas de los mal llamados santos. Ni una vez ella entró a una Iglesia Católica y se roció agua bendita, nunca encendió una vela a algún santo, nunca vio u oyó una misa Católica, nunca oró oraciones Católicas y ella nunca se arrodilló alguna vez para recibir una hostia de parte de un sacerdote Católico. María nunca se sentó alguna vez en una banca, silla o asiento de una Iglesia Católica. Ella nunca oyó a un sacerdote católico dar una homilía o lección Bíblica. María nunca estuvo en una Iglesia donde se utilizara un crucifijo como un emblema de culto o adoración y ni una vez ella cantó una canción en un servicio católico. María nunca creyó o supo sobre la trinidad. María nunca supo sobre la trinidad porque ésta no fue inventada y no se convirtió en una ley doctrinal obligatoria hasta el Concilio de Nicea en el 325 d.C. La doctrina de la trinidad no fue formulada hasta que Constantino presentó la "hoinoousios" "de una esencia" de Platón. Los Obispos, saltaron sobre esto y la aceptaron y la trinidad se convirtió en una doctrina impuesta por el trono del Imperio Romano. Todo aquel que rechazaba esa nueva doctrina, era quitado de su Obispado, se consideraba traidor, se le confiscaban su casa y demás propiedades, y algunos fueron condenados a muerte. María fue una mujer judía que creyó en un Dios. Como judía, a ella le era prohibido por el Primer Mandamiento tener una idea plural de la Divinidad. Lo que sea que María pensaba de su hijo Jesús, ella no pensó en él como un Dios de segundo rango bajo Dios el Padre, ni tampoco imaginó que él fuera una personalidad en el pensamiento de una tri-personalidad de un Dios. En otras palabras, María no creyó que Jesús fuera una personalidad alterna de Dios el Padre. Ya que ella retuvo las enseñanzas de los Profetas y de los Apóstoles, ella creyó que Jesús es Dios manifestado en carne, o sea que él es en efecto Dios el Padre manifestado en carne. No sabemos nada sobre alguna otra idea que ella tuviera, pero sabemos que no hay nada que sirva para demostrar que ella creyera en una trinidad, o los trinitarios habrían sacado a relucir esta información ante el mundo y habrían hecho una conmoción bien grande al respecto. María no creyó en el Credo de Nicea, ni en el Credo de Atanasio, ni tampoco en el mal llamado "Credo de los Apóstoles", pues ella no creyó en la trinidad. María no fue Católica, y si María hubiese vivido durante el tiempo de la inquisición, ella habría sido asesinada por los mismos que piensan que María fue Católica. María era Judía y miembro de la Iglesia Apostólica. La Iglesia fue establecida sobre 12 Apóstoles Judíos. No hubo Apóstoles Gentiles en la Iglesia en ningún momento durante el tiempo de la vida de María o de los verdaderos Apóstoles. En realidad, no hay provisión para un Apóstol Gentil en la Biblia. María nunca supo de un Papa Católico. El Apóstol Pedro nunca fue un Papa Católico. Él se casó y tuvo esposa pues la Biblia registra que él tenía suegra. Esfuerzos hechos para pervertir esto, son sólo ejemplos de cómo la Iglesia Católica ha adulterado mucha verdad y ha propagado mentiras y falsedades. María y sus demás hijos (María no fue una virgen perpetua, esa es otra mentira), estuvieron en el aposento alto (Hechos 1 y 2) y recibieron el don del Espíritu Santo. María misma, la madre de Jesús, habló en lenguas como el Espíritu le dio la habilidad para que hablase. María misma tuvo que ser salva. María estuvo allí cuando Pedro predicó Hechos 2:38. En caso de que Pedro hubiera sido el primer Papa ¿Entonces por qué la Iglesia Católica no acepta las palabras de Pedro en Hechos 2:38? ¿Por qué establecieron como ilegal que la gente se bautizara en el nombre de Jesús el Mesías para la remisión de sus pecados? María fue un miembro de la Iglesia que creía en la Unicidad de Dios, llena del Espíritu Santo, Apostólica. Ella murió en esta grande fe y su legado es el de una verdadera hija de Dios. Ella debe ser amada y respetada pero no adorada. No se le debe orar, y no se le debe venerar en una posición de divinidad, deidad, o como co-redentora o mediadora. María no está en el cielo ahora mismo, pues ella está muerta y está esperando por la resurrección así como los Apóstoles. Las personas que oran a María, creyendo que ella puede ir a susurrar o hablar a los oídos de su hijo para complacer la petición de los que oran a ella, están todos engañados. María no puede ayudar a una sola alma ahora mismo a encontrar a Dios. María no puede orar porque ella está muerta. María no puede cambiar ninguna cosa en este mundo actual. Todas las supuestas apariciones de María son falsas. Éstos son solo esfuerzos para probar que María ha resucitado o que ha sido raptada para no ver muerte, pero la Palabra de Dios dice que está establecido para los hombres mueran una sola vez y después de esto el juicio. María murió, y ella no será resucitada hasta que la Iglesia entera sea levantada de los muertos en el día postrero. ¡María nunca fue miembro de la Iglesia Católica Romana! Publicado por Julio César Clavijo Sierra en 08:38 Etiquetas: religiones, sectas, trinidad JUEVES 19 DE MAYO DE 2011 William Branham y los Branhamitas Por David K. Bernard. Tomado del Libro Historia de la Doctrina Cristiana Volumen 3, págs. 252-260 Fotografía de William Marrion Branham, tomada en el año de 1.950. Sus seguidores dicen que el halo de luz que se aprecia sobre su cabeza, es una señal de que él es el profeta para el tiempo del fin William Marrion Branham (1.909-1.965), fue quien marcó la pauta del reavivamiento del ministerio de sanidad después de la segunda guerra mundial. Siendo joven, Branham recibió una sanidad personal y se convirtió en un predicador bautista independiente. Más tarde, recibió el Espíritu Santo y se convirtió en un pentecostal. También aceptó el bautismo en agua en el nombre de Jesucristo y adoptó una visión no trinitaria, la Unicidad de la Deidad. [272] Él predicó en iglesias trinitarias y de la Unicidad, pero se mantuvo independiente. Branham dijo que había recibido visitas de Dios cuando tenía entre tres y siete años. Luego, en 1.946, declaró que un ángel lo visitó y le anunció que Dios le daba el don de la sanidad divina. Dijo que desde aquel momento en adelante, ese ángel fue su guía. Como prueba, los seguidores de Branham muestran una fotografía de 1.950, donde Branham se encuentra predicando en Houston. Por encima de su cabeza hay algo que parece ser un halo o destello de luz. Branham comenzó sus campañas de sanidad en 1.946, y los resultados fueron sorprendentes. En su apogeo, llenó los más grandes auditorios y estadios del mundo. Tal vez el milagro más sobresaliente y ampliamente atestiguado ocurrió en 1.951. William Upshaw, un congresista de California, Estados Unidos, que estaba paralizado desde hacía muchos años, fue sanado en una de las campañas de Branham. Este notable caso de Branham lo catapultó a la fama internacional. Branham tenía una rara habilidad para discernir las enfermedades de la gente. Las hacía venir de entre su audiencia, revelaba detalles acerca de ellos, les despertaba la fe y oraba por su sanidad. Muchas personas fueron sanadas. Walter Hollenweger, quien más tarde se convirtió en el secretario de evangelismo del Concilio Mundial de Iglesias, dio la siguiente descripción y análisis: “El ángel le daba señales para ayudarle en su tarea. La más importante fue la capacidad de Branham de identificar con una precisión asombrosa la enfermedad, y a menudo también los pecados ocultos de personas a las que nunca había visto. El autor, quien conoció personalmente a Branham y le sirvió de intérprete en Zurich, no tiene conocimiento de ningún asunto en que se haya equivocado en las declaraciones detalladas que hizo a menudo. Era característico de Branham, que él susurrara ciertas revelaciones personales a los que buscaban la sanidad, de manera que no fueran transmitidas por el micrófono y reveladas a los espectadores… Mucho de lo que se escribió sobre él en publicaciones pentecostales parece ser exagerado, pero hay un número de casos bien documentados de sanidades milagrosas… Sin embargo, él es generosamente juzgado, al admitirse que sus sermones no eran más que simples, y muchas veces ingenuos, y que al contrario de lo que él reclamó, sólo un pequeño porcentaje de los que buscaron la sanidad, fueron de hecho curados. El pastor pentecostal Leonhard Steiner, opinó que la campaña de Branham en Zurich le dejó una opinión pobre. Él escribió que el llamado para tomar una decisión por Cristo era "preocupantemente vago. No se distinguía ningún llamado al verdadero arrepentimiento". [273] Branham reunió un equipo administrativo de tres hombres: Jack Moore, Gordon Lindsay, y WJE "Ern" Baxter. Moore fue un pastor Pentecostal Unido de Shreveport, Louisiana, que quedó tan impresionado con Branham, al punto de que se dedicó a administrar sus campañas. Moore estableció contacto con su amigo Gordon Lindsay, quien fue un ministro de las Asambleas de Dios que se había convertido bajo Charles Parham. Lindsay renunció a su cargo para ser administrador a tiempo completo de Branham. Él escribió un libro sobre Branham, titulado “Un hombre Enviado por Dios”, y fundó una revista llamada “La Voz de la Sanidad” para promover el ministerio de Branham. Lindsay, amplió pronto la cobertura a otros ministerios de sanidad que fueron surgiendo con rapidez, sin embargo, esto ocasionó que Branham se separara de él. En última instancia, Lindsay adoptó el nombre de Cristo para las Naciones para su ministerio, su revista y el instituto bíblico que fundó en Dallas, Texas. Ern Baxter, fue un pentecostal independiente que viajó con Branham por un tiempo. Unos años más tarde, fue influenciado enormemente por el movimiento de la Lluvia Tardía, aunque finalmente comenzó a preocuparse por los errores de dicho movimiento. En última instancia, se unió al movimiento carismático y se convirtió en uno de los principales líderes del Movimiento de Pastoreo. (Ver el capítulo 10). F. F. Bosworth, que había salido de las Asambleas de Dios porque rechazó la doctrina de la evidencia inicial, se unió a Branham en las campañas de 1.948 a 1.950. La Comunión Internacional de Hombres de Negocios del Evangelio Completo, fundada en 1.951, se convirtió en un importante promotor de William Branham en los años 1.950´s y comienzos de los años 1.960´s. Branham fue amigo personal del fundador, Demos Shakarian, un Pentecostal Armeniano y líder laico de la iglesia en California. El mensaje central de Branham fue la sanidad y la prosperidad. Durante su época de mayor popularidad, él no hizo ningún énfasis en asuntos doctrinales. Por ejemplo, él creía que todos debían ser bautizados en el nombre de Jesucristo, incluidos los que ya habían sido “bautizados” en la fórmula trinitaria, pero él no acentuó esta creencia en sus audiencias masivas. En cambio, durante ese tiempo, él ejerció la mayor parte de su ministerio entre los trinitarios. Para las primeras tres reuniones de Branham, el predicador del mensaje de apertura fue Nathaniel Urshan, un evangelista pentecostal del nombre de Jesús, quien luego llegaría a ser superintendente general de la Iglesia Pentecostal Unida Internacional. Luego de la predicación, Branham llevó a cabo su ministerio de sanidad. Cuando Urshan proclamó el bautismo en el nombre de Jesucristo, Branham le pidió que no lo hiciera, y Urshan puso fin a su asociación con aquellas campañas. [274] El ministerio de Branham comenzó a declinar a mediados de la década de 1.950. Tuvo graves dificultades financieras, y cuando comenzó el movimiento carismático, tuvo dificultades para adaptarse a él. Branham venía de un trasfondo rural con educación limitada, mientras que la mayoría de los carismáticos de las principales denominaciones, eran gente citadina de clase media, y Branham no tuvo mucho éxito para atraerles. En su posterior ministerio, Branham comenzó a hacer hincapié en asuntos doctrinales, incluyendo varias creencias inusuales y aberrantes. Sus seguidores se redujeron a los que abrazaron esos puntos de vista. En particular, él enseñó lo que se conoce como la doctrina de la simiente de la serpiente. Esta doctrina afirma que el pecado original de la raza humana fue sexual. En el Jardín del Edén, Eva cometió pecado y se contaminó espiritualmente por tener relaciones sexuales con el diablo. Después de esto, Adán también fue contaminado al tener relaciones sexuales con ella. De esta manera, toda la raza humana cayó bajo el pecado y perpetuó el pecado en las generaciones futuras. Branham sostuvo además que Eva concibió un hijo del diablo, y que este hijo era Caín. Por lo tanto, Caín y sus descendientes estaban predestinados a la condenación. Esta satánica línea de sangre, sobrevivió al diluvio, ya que una de las nueras de Noé, fue supuestamente una descendiente de Caín. Así, incluso hoy en día, algunas personas son literalmente hijos del diablo y no pueden ser salvos. Ellos serán aniquilados al final de los tiempos. Por supuesto, nada en la Escritura enseña o implica algo parecido a la doctrina de la simiente de la serpiente. Sin embargo, Sun Myung Moon y la Iglesia de la Unificación ("la secta Moon"), promueven esencialmente ese mismo punto de vista en la actualidad. Branham interpretó que las siete iglesias de Asia Menor de Apocalipsis 2-3, son representativas de las diversas etapas de la Historia de la Iglesia. Interpretó a cada "ángel" (que literalmente en griego significa "mensajero") de la iglesia, como un profeta de Dios, especial para cada etapa respectiva. Por ejemplo, identificó a Martín Lutero como el mensajero o profeta para la edad de la Reforma. Branham llegó a la conclusión de que sus días eran la última era de la iglesia, o la edad de Laodicea, y que él era el profeta para esa edad. De hecho, su tumba es una pirámide que enumera siete edades y siete profetas, y Branham se identifica como el profeta del tiempo del fin. Tumba de William Marrion Branham en forma de pirámide Branham dijo que los que aceptaran su mensaje, se constituirían en la novia de Cristo, y que en el tiempo del fin subirían en el Rapto. También dijo que la religión organizada es una marca de la bestia. Aunque las personas de varias denominaciones podrían ser salvas, sufrirían por la Tribulación. Branham predijo que el Milenio comenzaría en 1.977. Branham se identificó como el Elías que habría de venir antes del día grande y terrible del Señor. (Ver Malaquías 4:5). Él dijo que esto también debería entenderse, en el sentido de que él es el ángel de Apocalipsis 10 y uno de los dos testigos de Apocalipsis 11. Branham sostuvo que el zodíaco y las pirámides contenían mensajes ocultos de significado profético. Él se refiere al zodíaco occidental, al parecer sin saber que este sistema zodiacal es completamente diferente al zodiaco oriental. Él creyó que las dimensiones de las pirámides fueron significativas porque Dios había inspirado su construcción. Sobre la base de su función profética, Branham abogó por lo que él llamó el ministerio de la palabra hablada. De acuerdo con este punto de vista, él predicó mensajes especiales bajo la unción de Dios, y Dios de hecho lo inspiró a hablar palabras de autoridad. Por lo tanto, aún hoy, sus seguidores estudian sus libros y cintas, creyendo que estos son el mensaje especial de Dios para esta edad. Uno de sus principales métodos de “evangelización”, es la distribución de los mensajes de Branham en forma escrita y grabada. Branham murió el 24 de diciembre de 1.965, como resultado de las lesiones sufridas en un accidente automovilístico de unos días atrás. Sus seguidores esperaban que muy pronto él se levantaría de entre los muertos, así como los dos testigos de Apocalipsis 11, por lo que embalsamaron y refrigeraron su cuerpo, y retrasaron su funeral por un mes. Algunos inclusive, creyeron que él nació de una virgen y que era Dios encarnado. Después del servicio conmemorativo celebrado durante el 26 de enero de 1.966, los seguidores de Branham retrasaron aún más su entierro para después de la Semana Santa, con la esperanza de que se levantaría como lo hizo Jesús. Por último, sus esperanzas fueron rotas, y lo sepultaron el 11 de abril de 1.966. En el funeral del 26 de enero en Phoenix, Arizona, el principal orador fue T. L. Osborne, un prominente evangelista según su propio juicio. Algunos de sus comentarios, demuestran la concepción inusualmente alta que los seguidores de Branham tenían para con él: “Dios… se vistió de carne, vino y nos mostró la nueva creación -como sería cuando todo fuera renovado por él. El precio fue pagado. Todos los reclamos fueron satisfechos. Caminó aquí en el cuerpo de un ser humano, un Dios-hombre a quien llamamos Jesús… El hombre que conocemos como William Branham, fue enviado para manifestar otra vez a Dios en la carne. Algunos van a pensar que estoy cometiendo un sacrilegio doctrinal (y esto realmente no me importa), pero Dios vino otra vez en carne humana y dijo: "Al parecer, yo debo mostrármeles de nuevo. Debo recordarles otra vez. Ellos tienen que ver una vez más. Una vez más deben saber cómo es Dios. Y Él bajó y envió a un pequeño hombre, a un profeta, ¡pero más que un profeta para este tiempo, a un Jesús hombre para este tiempo! Así vino el hermano Branham a lo largo del siglo XX y trazó exactamente el mismo camino. DIOS EN CARNE atravesó de nuevo nuestros caminos y muchos no lo saben. ELLOS NO LO HABRÍAN CONOCIDO SI HUBIERAN ESTADO AQUÍ-: CUANDO DIOS CRUZÓ POR SU CAMINO EN EL CUERPO LLAMADO JESUCRISTO!... Este es un asunto para dar gloria a nuestro Dios, que ha venido en carne otra vez en nuestra generación. Ha venido en carne, en todos nosotros, pero de una manera particular en este hombre que fue su profeta para esta generación”. [275] A pesar de que las profecías de Branham para el fin de los tiempos no fueron cumplidas y aunque no se levantó de los muertos, sus enseñanzas siguen siendo influyentes en la actualidad. Sus seguidores, generalmente conocidos como los Branhamitas, enseñan las doctrinas bíblicas del arrepentimiento, el bautismo en el nombre de Jesús, el bautismo del Espíritu Santo y la santidad de vida. En algunos lugares son el grupo más grande que aboga por el bautismo en el nombre de Jesús. Por desgracia, también promueven celosamente la doctrina de la simiente de la serpiente, la doctrina de la palabra hablada, y la necesidad de aceptar a William Branham como el profeta del tiempo final. Los Branhamitas existen en trece confraternidades y en muchas iglesias independientes. En los Estados Unidos, hay alrededor de 300 iglesias con 86.000 constituyentes y otras 400 iglesias en casas con 10.000 constituyentes. A nivel mundial, se estima que hay 1.150 iglesias con 191.000 constituyentes, y 1.380 iglesias en casas con 109.000 constituyentes. [276] Muchos observadores pentecostales, han concluido que Branham fue un hombre a quien Dios usó en gran medida para inspirar fe en la gente para recibir milagros divinos, sobre todo en la primera mitad de su ministerio. Él no era pretencioso, vivía con sencillez, y expuso una preocupación real por las personas y sus necesidades. Desafortunadamente, con el tiempo se desarrolló una opinión exagerada de su ministerio. Esa visión exaltada de sí mismo, su ingenuidad teológica y su espíritu independiente, lo condujeron hacia doctrinas falsas y destructivas que lo afectaron gravemente, dañando su eficacia y legado. Aun así, su énfasis en la sanidad y en la prosperidad, sus métodos de operación, y su énfasis en la palabra profética, más tarde tuvieron gran influencia en los "evangelistas" de la sanidad, en el movimiento de la lluvia tardía y en el movimiento carismático. Referencias [272] Él rechazó la idea de tres personas en la Deidad y la idea de un Hijo Eterno. Él sostuvo que Jesús es la plenitud de la Deidad encarnada. Sin embargo, él creyó que la humanidad de Jesús era una creación divina especial. María solo sirvió como “incubadora” y no fue su madre biológica. [273] Walter J. Hollenweger, Los Pentecostales (Peabody, MA: Hendrickson Publishers, 1972), 354-55. [274] Nathaniel Urshan, entrevista personal, Austin, Texas, 24 de abril de 1999. [275] El Funeral de William Branham www.biblebelievers.org/wbmtos.htm (Mt. Pearl, Newfoundland, Canada: Bible Believers Association, 1999), los énfasis están en el original. [276] Talmadge L. French, “Pentecostalismo de la Unicidad en Perspectiva Global: El Crecimiento Mundial y la Expansión del Movimiento de la Unicidad Pentecostal en el Contexto Histórico y Teológico” (M.A. thesis, Wheaton College Graduate School,cidad Wheaton, IL, 1998), 222. Publicado por Julio César Clavijo Sierra en 11:49 Etiquetas: religiones, sectas JUEVES 9 DE DICIEMBRE DE 2010 La Navidad es Pagana Por Cohen Gary Reckart Introducción El nacimiento del Mesías es un hecho histórico. El lugar de su nacimiento es bien conocido. La historia entera se encuentra en el libro de Lucas. Lo que no se encuentra allí es la historia de la navidad. Por navidad nos referimos al árbol de navidad, Santa Claus, el reno, el trineo, los juguetes, los duendes, el muérdago, las flores de pascua, el intercambio de regalos, el beber alcohol, el ir a prostíbulos, las fiestas decembrinas, y el convertir las casas e Iglesias en templos paganos. Los cristianos siempre se han enorgullecido de vivir por la Biblia. Si la navidad no es una celebración bíblica que fuera practicada por los apóstoles y los primeros cristianos, entonces ¿cómo estas costumbres paganas entraron en la Iglesia? Cualquiera puede ir a una biblioteca y hallar esta información, pero pocos se toman el tiempo o nunca desean saber. Muchos practican el paganismo de la navidad por pura ignorancia. Ellos simplemente no conocen bien. Ellos siguen las costumbres de su familia o de una Iglesia. Dado que los verdaderos apostólicos no practicamos el paganismo, con frecuencia somos acusados de no creer en el nacimiento del Mesías ¡Esto es falso! Los apostólicos predicamos más sobre el nacimiento del Mesías que cualquier otro grupo. Lo que nos rehusamos a predicar es la mentira de que Jesús nació el 25 de diciembre. Lo que también nos rehusamos a aceptar, es el paganismo ahora asociado con el nacimiento del Mesías. Los apostólicos encontramos aberrante tomar falsos dioses e ídolos y traerlos a la historia del nacimiento de Jesús. La entera celebración de la navidad es una mentira. Empieza afirmando que el Mesías nació el 25 de diciembre y termina con Santa Claus, los árboles de navidad, la doctrina de Balaam y la doctrina de la reencarnación. Aún cuando las mentiras de la navidad suelan estimular a los niños y darle a los adultos una excusa para ser paganos por una temporada, todo esto es el pecado de la idolatría. Es tiempo para que los cristianos remuevan las falsedades de la historia del nacimiento de Jesús Mesías. Cuando esto se lleve a cabo, podremos adorar a nuestro Señor en espíritu y en verdad. No hay verdad en que Jesús nació el 25 de diciembre. Practicar el error de la navidad es apostatar de las Escrituras y cometer idolatría durante la temporada de navidad. Esto conduce a la práctica de la doctrina de Balaam, que consiste en comer cosas sacrificadas o conmemoradas a los ídolos y cometer fornicación (inmoralidad sexual) (Apocalipsis 2:14). Quebrantar el primer mandamiento celebrando fiestas paganas, incluye el comer las mal llamadas comidas "santas", la decoración con colores y flores rojas (el color de la túnica de los zoganos, que eran las figuras principales del festival religioso conocida como la sakaia, celebrado anualmente en la antigua Babilonia), la música grosera que se difunde durante las festividades decembrinas, el bailar, el beber alcohol, los fuegos “sagrados”, las velas, el ir a prostíbulos, el dar regalos, y otras muchas cosas, incluso sacrificios humanos. El Nacimiento de Jesús Mesías María era una joven virgen hija de Elí, de la casa y linaje del rey David. Elí era el verdadero rey de Israel pero no era reconocido como tal, porque los romanos habían instalado a Herodes, un gentil pagano, como rey sobre los judíos. Elí no tuvo hijos y María era la hija mayor. Cuando Elí y su esposa murieron, María heredó el trono de David como la reina no reconocida. Sólo reinas dan a luz reyes, así que por nacimiento Jesús nació con el derecho al reino proveniente de su madre reina (si esto no es verdad, Jesús no tuvo linaje real ya que él NO era hijo biológico de José). José y María estaban desposados, es decir, ellos estaban comprometidos para casarse. A diferencia de los matrimonios modernos, cuando un hombre y una mujer judíos deseaban casarse, ellos se desposaban. En la ceremonia del desposorio se tomaban todos los votos matrimoniales. Todo lo que faltaba, era que el novio viniese a la casa de la novia y se la llevara para ser su esposa con todas las de la ley. José y María hicieron los votos del desposorio y cada uno se fue para su casa a esperar el día en que el novio llegara para llevarse a su novia. Este evento tomó lugar en la 65ª semana y 4º año de la profecía de las 70 semanas de Daniel. María se emocionó y partió para la casa de su prima Elisabet (cerca de Jerusalén) para contarle las nuevas. Antes de su partida, un ángel visitó a María y le dijo que ella iba a dar a luz un hijo. María le preguntó cómo sería esto posible ya que ella no había conocido varón: “Respondiendo el ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por lo cual también el Santo Ser que nacerá, será llamado Hijo de Dios” (Lucas 1:35). María recordó las palabras de los profetas concernientes a la venida del Mesías. Todas las hijas vírgenes de Israel deseaban ser la madre del Mesías. Esto era un tema frecuente comentado en Israel por aquellos días. Lo que muchos fallaron en comprender, era que el Mesías iba a venir a través de la línea de la simiente del rey David y no de las otras familias. María no era sólo de la línea de la simiente de David, sino que su padre Elí era el verdadero rey del linaje de David. Ella era la única virgen que calificaba para dar a luz al Mesías, el Príncipe. María aceptó la voluntad de Dios y ella concibió esa misma noche por la acción milagrosa del Espíritu Santo. En la colina de Judea, Elisabet, la prima de María, también había recibido un milagro. Ella no había podido tener hijos. Su marido Zacarías era sacerdote de la orden de Abías, el 8º de los 24 cursos sacerdotales (1. Crónicas 24:10). Lo cual quiere decir que él tenía que servir en el Templo durante la 8ª semana después del Pentecostés (Pentecostés era el inicio de los cursos anuales). 1er Mes 2do Mes 3er Mes Abib - Nisán (Marzo - Abril) Zif - Iyyar (Abril - Mayo) Sivan (Mayo - Junio) Primera Semana Joiarib (1) Seorim (4) Todos los Sacerdotes (Pentecostés) Segunda Semana Jedaías (2) Malquías (5) Abías (8) Tercera Semana Todos los Sacerdotes (Fiesta de Panes Sin Levadura) Mijamín (6) Jesúa (9) Cuarta Semana Harim (3) Cos (7) Secanías (10) Así que mientras Zacarías estaba en el Templo a la mitad de junio, un ángel le visitó y le dijo que su esposa Elisabet tendría un hijo. Este hijo iba a ser nazareo desde su nacimiento hasta su muerte. El ángel también dijo que este hijo sería el predecesor del Mesías: “E irá delante de él con el espíritu y el poder de Elías, para hacer volver los corazones de los padres a los hijos, y de los rebeldes a la prudencia de los justos, para preparar al Señor un pueblo bien dispuesto” (Lucas 1:17). Zacarías regresó a casa, y Elisabet quedó encinta en algún momento durante el siguiente mes. Según las Escrituras, ella entonces se recluyó en su casa durante cinco meses. Fue en el sexto mes de la maternidad de Elisabet, que el ángel Gabriel vino a visitar a María: “Al sexto mes el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David; y el nombre de la virgen era María” (Lucas 1:26-27). De mediados de junio hasta mediados de noviembre, hubo cinco meses. Entonces, en el mes de diciembre, el sexto mes, María fue visitada por el ángel Gabriel y ella quedó encinta por el poder del Espíritu Santo. María inmediatamente fue a la colina de Judea para contarle a su prima Elisabet de su desposorio y de la visita del ángel. Mes Judío Comienza la luna Nueva de Juan el Bautista Jesús 1. Abib / Nisan Marzo-Abril Nacimiento de Juan 15 de Nisán 4 2. Zif / Iyyar Abril-Mayo 5 3. Sivan Mayo-Junio Concepción de Juan después del 3er Sabáth 6 4. Tammuz Junio-Julio 1 7 5. Ab / Av Julio-Agosto 2 8 6. Elul Agosto-Septiembre 3 9 7. Ethanim / Tishri Septiembre-Octubre 4 Nacimiento de Jesús ¿15 de Tishri? 8. Bul / Marheshvan / Heshvan Octubre-Noviembre 5 9. Chisleu / Chislev / Kislev Noviembre-Diciembre 6 Concepción de Jesús ¿25 de Kislev? 10. Tebeth / Tevet Diciembre-Enero 7 1 11. Shebat / Shevat Enero-Febrero 8 2 12. Adar Febrero-Marzo 9 3 Cuando ellas se reunieron, el Espíritu cayó sobre ellas y Elisabet fue llena con el Espíritu Santo. Juan, que aún estaba en la matriz de Elisabet, también fue lleno con el Espíritu Santo (Lucas 1:15, 1:41). Elisabet profetizó: “¿Por qué se me concede esto a mí, que la madre de mi Señor venga a mí?” (Lucas 1:43). Hubo emoción, y ambas, tanto Elisabet como Maria, se edificaron y confortaron la una a la otra, por Juan (el bautista) y por el Mesías venidero. La expresión de Elisabet al decir “MI SEÑOR”, no puede significar otra cosa que “MI REY”. María se quedó con Elisabet hasta marzo (como tres meses)y se regresó a su casa en Nazaret: “Y se quedó María con ella como tres meses; después se volvió a su casa” (Lucas 1:56). ¡Ve! ¡Busca a María! Fue a mitad de año que el emperador romano decretó que los judíos pagaran un impuesto especial que caería en el tiempo anual de la siega. Cada familia debía volver a la ciudad de la cual descendían sus familias. Ambos, José y María, descendían del rey David, así que ambos debían ir a Belén para pagar sus impuestos. Fue en ese momento en que José decidió ir a buscar a María como su novia, pensando que así ellos podrían tener su luna de miel en Belén. Cuando José vino a buscar a María, había un hermoso bulto en su barriga, indicando que el Mesías iba a nacer pronto. Ella le dijo a José que no le había sido infiel y que su maternidad era un milagro de Dios. Ella no dudo en explicarle sobre la visita del ángel Gabriel. Quizá María derramó muchas lagrimas cuando su novio se alejó de ella diciendo que no consumaría el matrimonio, sino que se iba a divorciar de ella (la inmoralidad sexual después de los votos esponsales, era considerado adulterio o un quebrantamiento de los votos del pacto). Esa noche, mientras José pensaba en estos eventos se quedó dormido. María indudablemente estaba orando por su desposado marido: “Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es” (Mateo 1:20). José se levantó la mañana siguiente y regresó a buscar a María. Uno se puede imaginar los tiernos abrazos y la emoción que floreció entre ellos mientras empacaban para el largo viaje a Belén. Debido a que uno de los requisitos del Mesías era el nacer de una virgen, José y María no estuvieron juntos sino hasta después de que Jesús nació: “Y despertando José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado, y recibió a su mujer. Pero no la conoció hasta que dio a luz a su hijo primogénito; y le puso por nombre JESÚS” (Mateo 1:24-25). Dado que muchos estaban viajando para pagar sus impuestos, los lugares de hospedaje de Belén estaban llenos. El tiempo fue cumplido y ahora nos encontramos en la 65ª semana y 5º año de la profecía de las 70 semanas de Daniel. El nacimiento del Mesías ocurrió 9 meses después de la visitación de María en diciembre, por lo cual debió acontecer en el mes de septiembre (quizá en el mismo día de la expiación, para significar que el nacimiento del Mesías quitaría los pecados del mundo). Esto es probado no sólo por el hecho que María quedó embarazada en el sexto mes de la maternidad de Elisabet, sino por otros dos hechos. Primero, Jesús tenía treinta y tres años y medio cuando él fue crucificado. Él fue crucificado en la celebración de la Pascua durante el mes hebreo de nisán (o en nuestro mes de marzo). Contando seis meses hacia adelante o hacia atrás, se llegaría a que el mes del nacimiento de Jesús es septiembre. Segundo, había pastores que permanecían en los campos la noche en que Jesús nació. El mes de Octubre trae la lluvia y un viento helado del norte. Los rebaños eran sacados de los campos hacia el final de septiembre. Esto prueba que es imposible una fecha de invierno del mes de diciembre para el nacimiento del Mesías. Otro punto de importancia es, que si María quedó embarazada en el mes de diciembre, el sexto mes de la maternidad de Elisabet, ¿cómo podría Jesús también nacer en Diciembre? Los Sabios de Oriente Llegaron a una Casa, No a un Establo Después que Jesús nació, él fue puesto en un pesebre. Los Ángeles anunciaron a los pastores: “os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es CRISTO el Señor” (Lucas 2:11). Recién nacido, los pastores vinieron y le adoraron. Sin embargo, los sabios de oriente no encontraron a Jesús en el pesebre o en el establo. Ellos vinieron aproximadamente dos años después del nacimiento de Jesús Mesías, y lo encontraron en una casa. “Y al ver la estrella, se regocijaron con muy grande gozo. Y al entrar en la casa, vieron al niño [no a un recién nacido] con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra… Herodes entonces, cuando se vio burlado por los magos [la referencia es a hombres sabios, no a hombres supersticiosos], se enojó mucho, y mandó matar a todos los niños menores de dos años que había en Belén y en todos sus alrededores, conforme al tiempo que había inquirido de los magos” (Mateo 2:10.11, 2:16). Las Escrituras dicen que los hombres sabios entraron en una casa, no en un establo. Enseñar que los sabios entraron a un establo, y representar juegos o relatos cortos y satíricos para mostrar esa falsedad, es contar una mentira. La navidad hace mentirosos a pastores, iglesias, miembros de iglesias y padres. Usted notará además, que la Biblia no dice que hubo tres hombres sabios. Esto es también una mentira. El oro, el incienso y la mirra, no representan un regalo por cada sabio, sino que cada uno del número indeterminado de sabios, dio todos los tres regalos. Cuando los sabios no informaron a Herodes sobre la ubicación del nuevo Rey, Herodes ordenó que todos los niños varones de dos años y menores de dos años que vivieran en esa área, fueran asesinados. Esto prueba que los magos visitaron a Jesús dos años después de su nacimiento, o Herodes se habría enfocado en asesinar a niños mucho más menores. Esta es la historia bíblica del nacimiento del Mesías. Por favor note que no había árbol de navidad asociado con ella. No hubo Santa Claus. No hubo trineo volador lleno de juguetes. No hubo Señora Santa Claus, ni una banda de duendes trabajando ansiosamente en el Polo Norte. Los sabios no intercambiaron regalos entre sí, ellos se los dieron a Jesús. No hubo ebrios hablando obscenidades, ni hombres y mujeres teniendo fiesta alrededor de la representación de un pesebre. José y María no cocinaron cabezas de jabalís salvajes para una lujosa comida de quijadas de cerdo o sesos de marrano. La idea de una maravillosa barba con “un ojo que todo lo ve", hace a Santa Claus no sólo un dios espíritu que está en todas partes observando al bueno y al malo, sino que él realmente reemplaza a Jesús Mesías y se levanta superior a él durante la celebración pagana de la navidad. Cuando Jesús nació, fue un evento tan santo que Dios se cercioró de que los pecadores no lo testificaran. Los pecadores deben testificar al Mesías en la cruz, no en el pesebre. La escena del pesebre no invoca la condenación del pecado, y por esta razón los pecadores practicarán la navidad y negarán la obra de la cruz y la salvación año tras año. Ellos están atrapados en el “espíritu de la Navidad”, sabiendo plenamente que éste no es el Espíritu Santo, y que el Espíritu Santo no aviva aquella fiesta pagana entre la sociedad, y entre los comerciantes y distribuidores de licores. ¿De Dónde Vino Esta Paganalia? ¿Si el paganismo de la Navidad no comenzó con el nacimiento del Mesías, y si no fue practicado por los apóstoles y por los primeros cristianos, entonces de dónde vino? Usted podrá asustarse en conocer que la paganalia de la navidad tiene sus raíces en misterio Babilonia. Si eso no le asusta, entonces lea Apocalipsis capítulo 17 y vea los juicios de Dios sobre aquellos que están sumergidos en misterio Babilonia justo antes de la segunda venida del Mesías. Todo aquel que intente justificar el paganismo de la navidad por cualquier excusa, ciertamente se encontrará algún día de pie ante Dios y será cuestionado por idolatría. Este escritor no puede juzgar quién irá o quién no irá al infierno por este tópico. Pero una cosa si sé; si un hombre o una mujer recibe el conocimiento de la verdad sobre el paganismo pero lo rechaza, ya no queda más sacrificio por los pecados (Hebreos 10:26) ¡Es mejor tener cuidado! Este estudio bíblico no ha sido escrito para juzgar a aquellos que ya están muertos. Si aquellos que están muertos supieron sobre el paganismo de la navidad y no se arrepintieron ni lo abandonaron, entonces Dios debe juzgarlos como idólatras. Si el muerto no supo y nunca se le dijo sobre el paganismo de la navidad, entonces Dios le juzgará basado en la fe que elloshabrían seguido si lo hubieran llegado a conocer. Dios conoce la fe y la sinceridad que cada persona tenga por el amor a la verdad. Este estudio bíblico es escrito para los vivos, para que ellos no sigan las prácticas de sus antepasados muertos que nunca pudieron haber conocido la verdad. Nuestra salvación no está en la idolatría de nuestros antepasados muertos, sino que está en la verdad que nos salvará a través de nuestro Señor Jesús Mesías. Conoceréis la verdad y la verdad os hará libres. Muchos irán al infierno, porque ellos rechazaron la verdad de que la navidad es una celebración pagana. La Evidencia lo Probará La evidencia probará a cualquier corazón honesto que la navidad es pagana y que no tiene lugar dentro de la Iglesia del Nombre de Jesús. ¿Pueden los cristianos convertirse en paganos durante los veintiún días de la Navidad y olvidar el primer mandamiento de no tener otros dioses? Con frecuencia se alega que el paganismo de la navidad es bueno para los niños, pero esto es falso. ¿Debería enseñarse a los niños de los hogares cristianos a seguir el paganismo? ¿Estaban los niños judíos durante el tiempo de la Ley, privados de participar de las festividades idólatras paganas de Baal? ¿Acaso no se les mandó a las familias judías que no practicaran las fiestas paganas de los incrédulos gentiles de su alrededor? ¿Dónde hay un solo pasaje bíblico que permita la mezcla del paganismo con los caminos de Dios? ¿Si algún paganismo es aceptable, entonces por qué no lo es todo el paganismo? ¿Acaso no se nos dice que salgamos de en medio de ellos (de los paganos) y que no toquemos las cosas impías profanadas por la idolatría? ¿Si nosotros debemos estar separados y así ser un pueblo santo, cómo podremos mantener este testimonio uniéndonos a la paganalia idolatra, ir a fiestas embriagantes, colocar ídolos en nuestras casas, y colgar las tejedurías de los sodomitas como guirnaldas en nuestras puertas (2 Reyes 23:7)? Las guirnaldas en las puertas simbolizaban que alguien había muerto o que los ocupantes estaban lamentando una muerte. ¿Cómo llegó la guirnalda de la muerte a ser asociada con el nacimiento, excepto en los misterios de la paganalia donde se celebraba al fallecido Baal-Nimrod como regresando de los muertos y renaciendo, celebrado también como el renacimiento del sol de los declinantes y muertos días del invierno? Todos los símbolos de la paganalia deben ser examinados para ver lo que ellos simbolizan. Con esta información, un individuo puede entonces determinar si él es pagano, en parte pagano, o si es un verdadero cristiano. Una cosa es cierta; nadie que complete este estudio bíblico puede decir que nunca lo supo, y por favor no me escriba su negativa y justificación para ser pagano, diciéndome que usted va a adorar a Dios juntamente con el paganismo. Cada ministro debe librar de sus manos la sangre de las almas proclamando la verdad, aún cuando esto le incomode a quienes lo escuchen. Cada padre debe tomar la vigilancia de su casa y santificarla para la gloria del Mesías. Así como Dios prohibió que el Tabernáculo fuera lleno de paganismo, así cada padre debe guardar su casa como un tabernáculo sagrado dónde su familia esté apartada de todo mal. La casa es el santuario de la familia. ¡No la contamine, o si no el Mesías no es el Señor de su hogar! Si una persona decide permanecer indiferente y sin respeto por la Palabra de Dios, y continuar en la práctica del paganismo de la navidad, él no tiene lugar en la casa de Dios para hacerse contar con los santos del Altísimo. Los Santos son santos. Ellos poseen conducta piadosa o como la de Dios. Ellos son santos por virtud de la justicia de Dios imputada a ellos. Estos individuos sirven a Dios en la hermosura de la santidad y amor de la verdad. Ellos no seguirán el camino del pecado o paganalia. Ellos son ovejas de Dios y Él es su Pastor. Ellos no darán o compartirán la gloria de Dios con el paganismo. Al vencer victoriosamente al pecado, al mal y al paganismo, a ellos les serán dadas ropas blancas de justicia cuando lleguen al cielo. El Arbusto de Nimrod El dibujo de arriba, está en un pequeño sello de barro de forma cilíndrica encontrado en Babilonia. Éste retrata a Adán y a Eva sentados frente al árbol del conocimiento del bien y del mal. Hay dos frutos “regalos” bajo el árbol, uno para cada uno. La serpiente está detrás de Eva susurrándole en su oído que tome el regalo del fruto que está bajo el árbol y se lo de a Adán como un regalo amado. Aquí el diablo está actuando como un instructor y consejero espiritual, instruyendo a Eva sobre cuán buenos y hermosos parecen los regalos bajo el árbol. Aquí está la primera vez en la Biblia donde se celebra el "dar regalos" involucrando a un árbol. Note que incluso el árbol tiene la apariencia de un árbol de Navidad de hoja perenne. La celebración del dar regalos asociado con árboles, no se puede negar que empezó como se ilustra en la pintura anterior sobre ese antiguo sello. ¿El diablo está involucrado en los días de fiesta y cultos religiosos centrados alrededor de árboles de hoja perenne? En el Antiguo Testamento, la adoración al árbol continúa este antiguo misterio que se encuentra por todo lugar (Jeremías 10). Dios mandó que los Israelitas no plantasen algún árbol cerca del altar, a fin de prohibir el repromulgamiento de esta paganizada ceremonia en la religión de Dios. Si alguien se atreve a tratar de decir que tiene la sabiduría o la habilidad de cristianizar este paganismo, y que la forma de santificarlo es inyectando en él el nacimiento de Jesús, que tal persona sea anatema. Maranata. El árbol de navidad tiene una historia antigua que data de muchos siglos antes de que el Mesías naciera. La veneración y adoración de árboles asimilándolos como seres humanos fallecidos reencarnados, es tan antigua como Babilonia, el lugar de inicio de la falsa religión. En la Biblia, la adoración de estos árboles sagrados es llamada la adoración del árbol para Asera. Los paganos construían sus templos en lugares altos y luego plantaban los árboles sagrados representando la reencarnación cerca de sus altares. El “hexa” o “hexagrama”, se convirtió en el símbolo de sus lugares altos. Esto ha permanecido así en el ocultismo, que hasta este mismo día traza ese símbolo en sus emblemas y rituales que provienen de esa antigua religión. Todo esto fue estrictamente prohibido por Dios: “No plantarás ningún árbol para Asera cerca del altar del SEÑOR tu Dios, que tú te habrás hecho” (Deuteronomio 16:21). Podemos notar por el verso anterior, que nunca debía haber un árbol plantado (o puesto) cerca del altar de Dios. Esto era para impedir que los pensamientos relacionados con ídolos paganos y falsos dioses reencarnando en árboles, tuvieran lugar cerca del culto del Dios verdadero. Desde el tiempo de la teología liberal moderna (mediados de 1800), el árbol para Asera se entendía como varios árboles de hoja perenne plantados en circulo, con un templo construido en la forma de un hexágono (vea Stonehenge), y allí adentro promulgaban nuevamente los misterios que ellos creían comenzaron en el Edén con la serpiente y Eva. Así que estos lugares altos y aquellos árboles para Asera, eran un falso Edén. Ciertos ministros de pecado, que se adherían a la teología liberal, cambiaron la interpretación de los árboles para Asera, de los árboles sagrados de hoja perenne a la de un ídolo erigido. Debido a esto, muchos diccionarios y comentarios bíblicos escritos desde mediados de 1800, han llevado ignorantemente a muchos a adoptar el arbusto de Baal-Nimrod como el símbolo de la reencarnación que debe ser colocado al lado del pesebre del Mesías. Culto del Árbol de Asera En el libro Las Dos Babilonias, página 98, Hislop reporta: "El árbol de navidad, como ha sido declarado, era generalmente en Roma un árbol diferente, incluso el abeto; pero la mismísima idea que estaba implícita en la palmera estaba implícita en el abeto de navidad. . . Ahora, el leño de navidad es uno de los objetos asociados a Nimrod, deificado como el dios del sol, pero cortado por sus enemigos; el árbol de navidad es Nimrod revivido, el dios asesinado que viene a la vida nuevamente" (reencarnado). El culto al árbol de Asera o árbol sagrado de Baal-Nimrod, fue reprendido en Israel como vemos en numerosos lugares de las Escrituras: “Hizo también sacar la imagen de Asera fuera de la casa del SEÑOR, fuera de Jerusalén, al valle del Cedrón, y la quemó en el valle del Cedrón, y la convirtió en polvo, y echó el polvo sobre los sepulcros de los hijos del pueblo. Además derribó los lugares de prostitución idolátrica [de los homosexuales y lesbianas] que estaban en la casa del SEÑOR, en los cuales tejían las mujeres tiendas para Asera” (2. Reyes 23:6-7). En el solsticio de invierno, el árbol sagrado era cortado y decorado en memoria de la muerte de Nimrod, así como un rey se adornaría. Así que el árbol representa a Nimrod y decorarlo es un símbolo de adoración al dios pagano vestido con los adornos de un rey. Cuando el árbol moría (las hojas se caían y quedaba desnudo), todos los fuegos en el pueblo eran extinguidos. . . apagados. Los adoradores se reunían y el árbol de Baal era echado en el fuego. En las llamas se preparaba una "comida santa". El fuego sagrado de este sacrificio era llevado de vuelta a casa para re-encender la chimenea, como un recordatorio del renacimiento (reencarnación) de Nimrod y su soberanía sobre el hogar. Este es el significado del fuego de leña de las navidades. Los paganos tomaban el residuo del árbol quemado y tallaban un ídolo de éste. Parte de esta práctica incluso se menciona en las Escrituras: “Parte del leño quema en el fuego; con parte de él come carne, prepara un asado, y se sacia; después se calienta, y dice: ¡Oh! me he calentado, he visto al dios fuego; y hace del sobrante un dios, un ídolo suyo; se postra delante de él, lo adora, y le ruega diciendo: Sálvame, porque mi dios eres tú” (Isaías 44:16-17). Aunque los paganos decían que todo aquel que no adoraba o veneraba al arbusto de Nimrod estaba en peligro de enfermedad o muerte, los profetas calmaban los temores del pueblo de Dios, anunciando que evitar a estos ídolos de Baal no les traería maldición o daño. Tergiversando las palabras de los profetas de que no hay peligro de que estos arbustos traigan sobre el pueblo de Dios enfermedad o muerte, algunos seguidores de la teología liberal moderna, están enseñando ahora que es permisible tener estos arbustos de Nimrod (arbolitos), en el hogar y en la casa de Dios. Ellos están enseñando que puesto que ninguna maldición del árbol puede dañarnos (porque nosotros estamos protegidos por el Espíritu de Dios), es aceptable decorar el arbusto de Baal-Nimrod con oro y plata como los paganos, contrariando al profeta Jeremías que advirtió a los judíos a no imitar o seguir dicha práctica. Lea cuidadosamente lo que el profeta Jeremías escribió concerniente a la antigua práctica de decorar el árbol de Baal. Recuerde que éste no se llamaba árbol de navidad, hasta que la Iglesia Católica le dio ese nombre: “Oíd la palabra que Jehová ha hablado sobre vosotros, oh casa de Israel. Así dijo Jehová: No aprendáis el camino de las naciones, ni de los signos del zodiaco tengáis temor, aunque las naciones las teman. Porque las costumbres de los pueblos son vanidad; porque leño del bosque cortaron, obra de manos de artífice con buril. Con plata y oro lo adornan; con clavos y martillo lo afirman para que no se mueva. Derechos están como palmera, y no hablan; son llevados, porque no pueden andar. No tengáis temor de ellos, porque ni pueden hacer mal, ni para hacer bien tienen poder” (Jeremías 10:1-5). Los versos anteriores identifican la antigua práctica de los adoradores del arbusto de Baal. Hoy, esta práctica es exactamente reproducida con el árbol de navidad. Si el árbol de navidad no estuvo en el nacimiento del Mesías y no fue usado por los apóstoles y por los primeros cristianos, ¿cómo fue que esta práctica pagana de erigir o conmemorar a un dios falso entró a las Iglesias? Ésta vino desde la Iglesia Católica Romana y todo el mundo sabe esto. Esta idolatría es mucho peor que la herejía de la trinidad, aún así esta recibe poca o ninguna atención de los supuestos estudiosos y escritores de la doctrina de la Iglesia. ¿Por qué? Se afirma que Martín Lutero fue el primero que trajo la celebración del árbol de navidad del paganismo del pueblo alemán y lo introdujo en la Iglesia Protestante. Esto no puede probarse y es en efecto falso. El árbol de Baal era usado en celebraciones católico-romanas siglos antes de Martín Lutero. Los primeros rastros del uso del árbol de hoja perenne entre los católicos, proviene de la adopción de la fiesta de la saturnalia de los antiguos romanos paganos. La palabra “saturnalia” proviene del planeta Saturno del cual toma nombre nuestro día sábado. Según Alexander Hislop, Saturno era también Nimrod, como lo hallamos en su libro Las Dos Babilonias en las páginas 31 y 32. La saturnalia es la fiesta romana de Nimrod, la cual era celebrada en el solsticio de invierno. Duraba cinco días e incluía el 25 de Diciembre, el gran día de Baal. Zoganos, El Señor del Desorden Vestido de Rojo En la antigua Babilonia se celebraba el festival religioso conocido como sakaia. Durante estos cinco días de Paganalia, la embriaguez de ambos, hombres y mujeres era normal. Éste era el único tiempo del año en que era permitido que una esposa o un esposo cometieran adulterio con un vecino, un extraño, cualquier pariente político, e incluso incesto, y no se consideraba como una violación de sus votos matrimoniales. Todo esto se hacía para la adoración del espíritu de Baal. Los esclavos eran puestos en libertad y los señores o amos se convertían en sirvientes para los esclavos durante esta apóstata celebración. Uno de estos esclavos se vestía con un vestido rojo o púrpura y era llamado el "señor del desorden". Este hombre vestido de rojo era llamado Zoganos (un nombre para el diablo). El diablo era dibujado la mayoría de las veces vistiendo un traje rojo similar. Los manifestantes intercambiaban regalos y un ramo de hoja perenne, como un símbolo de desearle al otro una feliz y buena reencarnación. El barreño, ahora llamado entre nosotros, la "ponchera" de la navidad, se llenaba de licores condimentados con especias. La borrachera de la saturnalia y navidad, no es nada más que el misterio Babilonia adoptado por católicos y protestantes, usando el nacimiento del Mesías para camuflar y cubrir el misticismo oculto. Debido a que Tamúz fue asesinado por un jabalí salvaje, el cerdo era sacrificado en represalia contra esa especie. La cabeza y el pernil del jabalí eran comidos con gran triunfo. La prohibición de comer carne de cerdo en la antigua Torá, era la forma en que Dios evitaba a los Israelitas que celebraran las fiestas de Baal. La carne de cerdo no era mala en sí, lo malo era que se había convertido en algo básico de los sacrificios paganos y estaba prohibido comer aquello sacrificado a los ídolos. El cerdo era el sacrificio central de la celebración de Baal. Profanar el templo judío con el sacrifico de un cerdo, era entonces convertirlo en un templo de Baal. El cerdo, asesino de Tamúz, es re-asesinado (sacrificado) cada navidad, cuando muchos preparan jamón para la cena familiar, y el jamón es comido en celebración a la fiesta de Baal. Ellos no saben por qué el comer jamón está asociado con la cena de navidad, pero la verdad está allí para que cualquier persona la descubra si le echa un vistazo. Empiece con el libro de Alexander Hislop en la página 99. Se decía que el árbol de navidad brotó de la tumba de Tamúz. Los paganos babilónicos creían que Nimrod reencarnó como Tamúz. Durante el tiempo de navidad, era costumbre de los paganos golpear la madera si ellos no querían que algo sucediera, y así lo suplicaban en la presencia del árbol de Baal (arbusto de Nimrod). Ahora, no estamos diciendo que es pecado comer jamón, chuletas de cerdo o tocino, porque aquella Ley terminó el día en que Jesús fue clavado en la cruz. Lo que estamos diciendo, es que la práctica pagana de sacrificar y comer carne de cerdo era el aspecto central de las festividades de Baal, y continúa hasta nosotros hoy, por lo cual este fue el propósito de la Ley al prohibir comer la carne de cerdo. El nacimiento del Mesías fue contaminado con costumbres paganas que se camuflaron y recibieron aprobación de parte de la Iglesia Católica. No es nada equivocado despojar al nacimiento del Mesías del paganismo de la navidad. Apártese de Baal y derrote al papado católico en sus corrupciones. El afán de mantener al Mesías en la navidad, es la triste mendicidad de los simpatizantes católicos, que aún desean una cubierta y una excusa para celebrar la "fiesta de los necios". El árbol de navidad simboliza la doctrina pagana de la reencarnación y permanencia de un dios. El árbol es el símbolo de una falsa doctrina y la presencia de un dios falso. Dicho símbolo se encuentra en contra de la verdad, pues la presencia del árbol de navidad intenta enseñar que no está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio, según como lo dice la Escritura en Hebreos 9:27. Es erróneo unir el árbol de navidad con el nacimiento de Jesús en un pesebre o incluso asociarlo como el propio nacimiento del Mesías. El árbol de navidad es un símbolo que enseña que la reencarnación es el camino para la vida eterna, pero la Biblia enseña que el Mesías es el ÚNICO CAMINO (Juan 14:6). El nacimiento de Jesús Mesías representa la verdad de que la humanidad está perdida y que nuestra única esperanza está en el plan de salvación de Hechos 2:38. El árbol de Navidad es entonces una mentira. Su presencia habla de una mentira. El mensaje del árbol de navidad es un mensaje del diablo, en el que se pretende decir que Jesús Mesías no es el Camino, la Verdad y la Vida, sino que hay otro camino, otra verdad y otra vida que ha sido traída de misterio Babilonia, y que por medio de la reencarnación todos pueden obtener la vida eterna sin el Mesías. Los judíos adoradores de Nimrod llaman a esta reencarnación “gilgul”. El árbol de navidad no tiene cabida en el hogar de los cristianos. El árbol de navidad tiene una conexión directa con los árboles de Asera que eran plantados en los lugares altos alrededor del altar de Baal. El pastor Reckart informa que: "Los adoradores paganos plantaban los árboles de Asera para reconstruir un simbólico huerto del Edén, donde según los misterios babilónicos, la serpiente cometió adulterio con Eva y este adulterio era promulgado nuevamente en el ritual de Baal". Esto es exactamente lo que se practica en los aquelarres de la brujería de la actualidad. Los paganos se reunían dentro de un gran círculo dibujado alrededor del ídolo (o ídolos). Ellos se tomaban de las manos, bailaban y se desnudaban mientras cantaban y entonaban temas de sexo, vida, muerte y reencarnación. En un momento del ritual, después de que un niño era sacrificado sobre el cuerpo desnudo de una mujer (el altar), el sacerdote y su sacerdotisa abrían el místico círculo y los adoradores se echaban divididos en parejas para cometer inmoralidad sexual entre los árboles de Asera (árboles de navidad). Hoy se desconoce cuánto adulterio y perversión sexual está asociado con la celebración de Baal, pero sabemos que el adulterio, la fornicación y la apostasía sexual, corren desenfrenados durante la fiesta del "espíritu de Baal", llevándoles arrastrados a la gruesa estupidez, destruyendo hogares, matrimonios, familias y autoestima. Una imagen del místico árbol de la vida era colocada entre los árboles de Asera. El fruto de este árbol simbolizaba el primer "fruto regalo" bajo el árbol que Eva le dio a Adán, y que ahora representa la promiscuidad (descaro) y la vida eterna a través de la reencarnación sexual. La doctrina secreta sobre el árbol, fue judaizada en el sefirot de la cábala. Este misticismo intenta reemplazar a Jesús Mesías, quien es el verdadero Árbol de la Vida representado en el Menorá, el candelabro de siete brazos del tabernáculo. La navidad pagana original involucraba mucho a los niños, ya que miles de ellos murieron a lo largo de los siglos, sacrificados en los fuegos de navidad a Nick (Nick significa diablo, busque su diccionario). ¿Santa Claus sólo pretende ser un hombre anciano gracioso que desciende por la chimenea o se introduce a través de la cerradura de una puerta? ¿Él es el "padre", originador de esta fiesta pagana? ¿La evidencia prueba que él no tiene conexión con la cristiandad o el nacimiento del Mesías? Según la mayoría de los libros, Nick es una creación fantasiosa. Él toma su papel de un supuesto sacerdote católico llamado Nicolás. Se afirma que este Nicolás visitaba a los niños pequeños durante esta paganalia y les daba regalos. Supuestamente esta práctica se popularizó y la Iglesia Católica y las familias católicas comenzaron a adoptar el mismo espíritu del dar regalos, proveniente de la fiesta de la saturnalia. Cuando los protestantes se sublevaron contra el papado, se dice que ellos también rechazaron la celebración de la navidad y el folclor del viejo San Nicolás. De hecho, los puritanos que vinieron a los Estados Unidos, prohibieron estrictamente a cualquier persona celebrar la navidad. Según el libro "El Hombre, Mito y Magia" volumen 4, página 480: "Los puritanos llegaron al poder en el siglo 17. La navidad fue atacada como el día en que los antiguos paganos festejaban a su dios Saturno". Estos son los mismos puritanos que iniciaron el primer Día de Acción de Gracias. No fue sino hasta 1836, en Alabama, que la navidad fue declarada un día feriado en los Estados Unidos. Desde ese tiempo, casi todas las Iglesias protestantes se han vuelto a la tradición católica de la navidad, que fue tomada prestada de la pagana saturnalia romana y de la "fiesta de los necios". Sin embargo, Santa Claus tiene más historia, ya que su folclor se deriva de un no probado sacerdote llamado Nicolás. Según la fuente previa, en la misma página, se dice de la navidad: "Incluso en el continente, el festival continuó mostrando muchos rasgos heredados de la saturnalia. En particular, ‘la Fiesta de los Necios’ era un salvaje libertinaje recordativo del pasado pagano. Cuando los normandos invadieron a Inglaterra en 1066, introdujeron a un maestro de ceremonias en la navidad inglesa. Conocido como ‘el señor del desorden’, su colega en Escocia era llamado ‘el abad (santo) de la insensatez’. ‘El falso rey’, aseguraba que la navidad se llevara a cabo dentro de las líneas tradicionalmente paganas". Este ‘señor del desorden’ vestía con atuendo rojo o púrpura, y guiaba al pueblo en cantos, bailes, bebidas y orgías sexuales. Como ‘el falso rey’, él recompensaba al pueblo con regalos. Maridos y padres también se vestían y seguían a este ‘santo de la insensatez’, en un gran desfile por las calles del pueblo. En la noche, algunos se disfrazaban y un gran tiempo de conducta impura y lujuriosa era disfrutada por todos. Debido a que el adulterio era permitido en este festival, todos se desordenaban. Hoy el mismo “espíritu” de navidad invade la tierra y hay más adulterio en esta época del año que en todas las demás. La pregunta aquí es ¿por qué las iglesias y los cristianos desearían que tal símbolo estuviese asociado con el nacimiento del Mesías? Esta prueba de amor por la verdad no es nueva. Los judíos se enfrentaron con las mismas decisiones en el Antiguo Testamento. Los festivales y fiestas de Baal eran casi una copia exacta de nuestra moderna navidad. Dios prohibió estrictamente a los judíos, tener algo que ver con estas costumbres paganas e impías (Jeremías 10:1-5), y mezclarlas con los días santos de la Ley. Los judíos no debían aprender los caminos de los gentiles y volverse de su salvación para unirse a los paganos en sus fiestas. Los cristianos deben tomar esto como una lección de que Dios rechazará que el mismo paganismo sea traído a la Iglesia en el disfraz de la conmemoración del nacimiento del Mesías. La Fiesta de los Necios Santa Claus es un falso rey, y en Escocia ‘el santo de la insensatez’. Él es el ‘señor del desorden’, el líder de la ‘fiesta de los necios’, y no tiene lugar en el nacimiento del Mesías. Cualquier ministro o creyente que celebre la fiesta de los necios, ha traído una vergüenza abierta al evangelio del Mesías. Nosotros no podemos comer de ambas, de la mesa de la fiesta del diablo y de la mesa de la fiesta del Señor: “No podéis beber la copa del Señor, y la copa de los demonios; no podéis participar de la mesa del Señor, y de la mesa de los demonios” (1. Corintios 10:21). Los que participamos de la mesa del Señor en la comunión, estamos comprometiéndonos a no participar de la mesa del diablo. Todo aquel que participa de una fiesta pagana después de recibir la Cena del Señor, ha mentido. Ellos no han discernido la sangre y el cuerpo del Señor. Debido a esto, algunos hombres y mujeres notables han muerto y Dios los juzgará. ¡La mesa del Señor no fue lo suficientemente buena para ellos! Ellos consideraron la mesa del diablo un deleite del que no se abstendrían durante las celebraciones de Baal. Durante los veintiún días de la navidad, éstos han tenido en nada el mandamiento bíblico de no unirse en yugo desigual con los incrédulos (2. Corintios 6:14). Ellos consideran estúpido o retrogrado que los profetas declaren que no hay concordia entre el templo de Dios (nuestros cuerpos) y los ídolos de la navidad. Aquellos que celebran la navidad, están enseñando que sí hay concordia entre el templo de Dios y los ídolos durante los veintiún días de navidad, ya que cada uno toma el espíritu de Nick (‘San Nicolás’), el intercambio de regalos y el decorar los corredores con ramas de acebo. Dado que los niños eran usualmente molestados, violados y sus órganos sexuales eran separados de sus cuerpos durante los sacrificios a Baal (todavía se hace esto en la brujería negra), no es de extrañar que durante la navidad, la molestia y el abuso a los niños aumente dramáticamente. Hubo cientos de casos de abuso sexual a niños reportados a las agencias protectoras de menores en el paso del año 1994 a 1995. ¿Deberían los cristianos contribuir con este mal, tomando el "espíritu de la navidad" y promoviendo la lujuria que acompaña a esta fiesta pagana? La navidad, de cualquier manera es un fraude. ‘Santa’ (o Santa Claus) es tan malo, como cualquier vendedor que llegara a una puerta intentando engañar a los confiados compradores. A los niños debe enseñárseles la verdad sobre Santa Claus y cómo este personaje se inmiscuyó en la historia del nacimiento del Mesías. ¿Enseñar esta verdad es algo malo? Navidad, Lo Que Dicen Los Libros Los libros nos dirán que la Biblia no contiene la historia de la navidad, con árboles de navidad, Santa Claus, fiestas de ebrios, adulterio, fornicación, homosexualidad, abuso de niños o el dar regalos. Las celebraciones paganas que pre-existieron a la navidad, luego practicadas y llamadas navidad, son condenadas en la Biblia. Podemos comenzar con la simple prohibición contra la idolatría (Gálatas 5:20). De esto nos podemos mover a la embriaguez la cual también es condenada (Gálatas 5:21). Toda inmoralidad sexual es condenada (Gálatas 5:19). El abuso y sacrificio de niños son condenados (Deuteronomio 18:10). El dar regalos asociado con el culto pagano de ídolos y la celebración de fiestas paganas es condenado (Ezequiel 20:39). El colocar un árbol de Baal es condenado (Jeremías 10:1-5). Por lo tanto, todo aquel que use la Biblia, verá que todo este Santo Libro condena la navidad en toda forma y modelo. Los Diccionarios: En inglés, navidad es “Christmas”, contraído de “Christemasse” o “Cristis masse”, que literalmente significa “la Misa de Cristo”. Así que “Christmas” es la unión de dos palabras: "Cristo y misa". La primera palabra describe a Jesús. La segunda, la misa, describe al ritual pagano de la Iglesia Católica, en el cual es celebrada la eucaristía. La misa es un ritual especial, en el cual se dice que el pan y el vino se convierten milagrosamente en la verdadera carne y sangre del Señor. La misa va más allá, pues se dice que realmente es la re-crucifixión del Mesías en forma simbólica. Supuestamente, el sacerdote re-crucifica al Mesías en cada misa para que así haya sangre y carne frescas para los comulgantes. La palabra “Christmas” es entonces un oxímoron... ésta significa tanto el nacimiento como la muerte del Mesías. La misa misma, es un ritual pagano que no se encuentra en ningún lugar de la Biblia. Fue tomado prestado de los templos paganos. El crucifijo con un anillo alrededor del ápice es puesto en el lugar del hexágono y representa al disco solar (a veces llamado la estrella ardiente), que sombreaba la cabeza del ídolo Nimrod (aureola que es vista detrás de las cabezas de los santos en los cuadros y pinturas católicas). La aureola no es nada más que el símbolo del sol y también de Nimrod, con el poder de lucifer sobre él como su unción. Los cristianos nunca deben usar una aureola para ningún propósito. Las oraciones a los ídolos fueron alteradas, quitando el nombre de los falsos dioses e insertando el nombre del Mesías. En algunos casos, la palabra “Baal” fue sustituida por “señor” para ocultar que se le oraba o cantaba a un ídolo pagano (recuerde que los Beatles cantaban “Mi Dulce Señor” al dios hindú Krishna, y los cristianos pensaban que era para Jesús y se la pasaban cantando aquella canción en sus iglesias como especial). La Iglesia Católica cambió los cantos y oraciones, para que uno pensara al escucharlas, que estaban dirigidas a Jesús, cuando en realidad no era así. (Para una revisión más completa del sacrificio de la misa, vea el libro de Alexander Hislop, Las Dos Babilonias, páginas 156-165. El mismo uso de la palabra “Christmas”, para significar algo santo, es una conducta profana). Los Peregrinos, fundadores del Día de Acción de Gracias: En “el libro de los Santos y Extraños”, de George Willison, página 104, él nos informa sobre las palabras de John Robinson en “Una Justa y Necesaria Apología (1619) Contra la Iglesia Holandesa Reformada”, donde dice: "Y no es posible que los holandeses puedan ser verdaderos cristianos, mientras que ellos sigan vehementemente celebrando la pascua de resurrección y la navidad, para las cuales no hay garantía en la Escritura". En la página 160, él reporta: "El trabajo comenzó en serio el lunes 25 de diciembre, el cual por supuesto era navidad, pero esto daba lo mismo para los peregrinos, porque ellos despreciaban la navidad catalogándola omo una "invención humana", otra "corrupción romana”, una supervivencia de los días paganos, como en efecto lo era". En la página 377, el Sr. Willison reporta: “Y mantener a los anglicanos en su lugar, era ahora un delito que previamente había sido sólo un error social, por lo bastante serio que era celebrar la navidad absteniéndose de obras, festejos o de cualquier otra cosa". La Enciclopedia de lo Oculto de Lewis Spence, página 67, dice: "No hay garantía Bíblica para la celebración del nacimiento de Jesús el 25 de diciembre, ni existe un preciso indicio del día en los relatos del nacimiento en los evangelios de Lucas y Mateo... La mención en el Occidente de un festival en la ahora fecha tradicional, está en un almanaque del 354 d.C., el cual Furio Dionisio Filocalo, un calígrafo, iluminó para el uso de los cristianos en Roma... Esta era además la fecha en el Calendario Juliano del solsticio de invierno, el día en el cual el sol renace, también celebrado por los adherentes del culto oriental del dios sol Mitra". El Diccionario de Misticismo de Nevill Drury, dice: “La celebración de la Navidad el 25 de diciembre, data del 336 d.C., cuando la fiesta pagana del natalis solis invicti (nacimiento del sol invencible) establecida por el emperador Aureliano en el siglo tercero d.C., fue convertida en un día cristiano santo, refiriéndose "al sol de justicia" como el Mesías”. Alexander Hislop, dice en Las Dos Babilonias: Página 93; "Que la Navidad era originalmente una fiesta Pagana está más allá de la duda. El tiempo del año, y las ceremonias con las cuales aun se celebra, prueban su origen... Hombres rectos se esforzaron por refrenar la corriente, pero a pesar de todos sus esfuerzos, la apostasía continuó, hasta que la Iglesia, con la excepción de un pequeño remanente, se sumergió en la superstición pagana". Página 97; "El árbol de navidad, ahora tan común entre nosotros, era igual de común en la Roma pagana y en el Egipto pagano". Página 98; "El árbol de navidad es Nimrod revivido, el dios asesinado que viene a la vida nuevamente" (reencarnado). Página 102; "No puede haber duda entonces de que la fiesta pagana del solsticio de invierno, en otras palabras la navidad, se llevaba a cabo en honor del nacimiento del mesías babilónico". Ya ha sido mostrado que Santa Claus está directamente relacionado con Nimrod. Santa Claus es entonces un falso mesías. Como falso mesías, él no ofrece ningún plan de salvación. Él no está en contra el pecado o del mal. Él nunca señala al Mesías como el verdadero Dios que vino manifestado en carne para salvar pecadores. Santa Claus nunca es representado como un santo o una persona santa. Él nunca admite alguna doctrina del Nuevo Testamento. Él es símbolo de la embriaguez, de la reencarnación, es un dios falso, un rey falso y un vendedor ambulante de todos los productos impíos e insalubres. El árbol de Navidad también ha sido exhibido como el ídolo que éste es. Algunos han dicho que no lo adoran y que por lo tanto no pecan teniendo a aquel ídolo. ¿Qué marido permitiría que en su habitación conviviera otro hombre, en tanto que su amada esposa no tuviera intimidad con ese otro hombre? Del mismo modo, el primer mandamiento no menciona la adoración, aunque tener un ídolo es una forma de adoración. Simplemente dice NO TENDRÁS dioses ajenos delante de mí. ¿Es Dios un Dios celoso? ¿Por qué entonces traer a otro dios al santuario del hogar? Límpiese de eso para que el Reino de Dios se establezca en su corazón, porque la habitación de la que hablamos es su CORAZÓN. “No tendrás dioses ajenos delante de mí” (Éxodo 20:3). Todo aquel que tiene un árbol de navidad, o cualquier otro dios en cualquier forma o modelo, es un idólatra. Pablo dijo que los tales no heredarán el Reino de Dios. La idolatría es la equivalencia espiritual del adulterio. Por esta razón, cualquier cristiano que practica o celebra la navidad, está diciendo que el adulterio es perfectamente legal e incondenable. Conclusión Al igual que con cualquier pecado, la navidad es difícil de detener para hacer el ajuste apropiado. La navidad, junto con otras fiestas paganas son sólo un hábito, una mala costumbre, y aquellos que nos rodean quieren que creamos que estamos siendo exagerados y difíciles al respecto. Así como es mofado y ridiculizado por sus compañeros de vicio, el adicto al alcohol o a las drogas que anuncia que ya es suficiente y que desea apartarse, así recibe el mismo trato la persona que se pone en pie entre sus amigos que practican las fiestas paganas y anuncian que las abandonan. El dejar fiestas paganas ha incluso dividido familias. El paganismo, así como el alcohol, la droga, y el tabaco, es ahora visto como santidad. Incluso muchas Iglesias ya no predican más contra el pecado del paganismo. ¿Pero esto hace que dicho pecado sea aceptado por Dios? ¿Si todas las iglesias renuncian a predicar contra el paganismo, la ausencia de esa predicación lo haría santo y puro? Es erróneo que practiquemos las fiestas paganas en nuestras casas y en nuestras iglesias, representando la muerte y resurrección de Nimrod. ¿Acaso adorar al ÚNICO DIOS, no es la única fe verdadera de los cristianos? La navidad es una celebración adictiva, porque todo el mundo parece tropezar en los pecados permitidos por las costumbres paganas. Esta fiesta es un hábito anual que pasó hasta nosotros por ancestros que también fueron engañados. El diablo no tiene más gozo que el de dar a las mentes humanas la ilusión de que el mal es bueno. Aquellos que renuncian a celebrar las fiestas paganas, están dando sólo un mensaje a aquellos a su alrededor. Ese mensaje es que ellos aman a Dios con todo su CORAZÓN, MENTE Y ALMA. ¿Cómo podría tener Baal cabida en ellos? Publicado por Julio César Clavijo Sierra en 02:27 Etiquetas: religiones, sectas, vida cristiana

No hay comentarios:

Publicar un comentario